¿Cómo es un taller ?

¿Qué sucede en un taller?

La preparación para el taller comienza con una charla introductoria dirigida a las personas que asisten por primera vez a la experiencia, la cual generalmente se realiza dos dias antes (jueves) del  taller experiencial (sabado). En ésta charla se expone la teoría y practica de la Respiración Holotrópica abriendo la oportunidad para conocer el sustento teórico del proceso terapéutico y su desarrollo histórico y científico, dar información sobre la secuencia de las sesiones, hacer preguntas y conocerse mutuamente.

En el taller experiencial de un día, el proceso se desarrolla en parejas: cuando uno de la pareja “respira” el otro será “cuidador” del otro/a. Cada sesión dura aproximadamente tres horas. Posteriormente se invierten los papeles y quien estaba desempeñando el rol de “cuidador” vivirá la experiencia de “respirador”. Se anima a los participantes a experimentar lo que su inconsciente va trayendo a su experiencia mientras mantienen una respiración profunda y continua. En algunos casos se movilizan energías bloqueadas y el facilitador proveerá ayuda a través de un trabajo corporal focalizado, si este es requerido.

Después de cada sesión de respiración hay un tiempo destinado a empezar a integrar la experiencia a través del dibujo de un mandala. Posteriormente se hace una reunión de grupo, donde cada participante es libre de expresar verbalmente lo que desee de su propia experiencia.

Compartir las vivencias con otros es uno de los más fuertes elementos en el proceso de integración, así como escuchar las historias de otros puede proveer un positivo y profundo impacto en el proceso individual.

Es un objetivo primordial durante toda la jornada brindar y crear un profundo sentido de apoyo, soporte y seguridad a los participantes, lo cual facilita la exploración de la conciencia y niveles más profundos de conexión con nuestro “sanador interno”.

DIRIGIDO A:

Pueden participar todas aquellas personas, mayores de 14 años, interesadas en el autoconocimiento y en procesos de sanación personal. No es necesario experiencia previa.

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Talleres dictados

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Participantes

Contraindicaciones

Las contraindicaciones para este trabajo son: embarazo, enfermedades cardiovasculares severas, epilepsia, historial con desordenes emocionales severos o patologías psiquiátricas graves, operaciones recientes de importancia, hipertensión no controlada médicamente, glaucoma, procesos infecciosos graves y fracturas recientes.
Es imprescindible llenar y firmar una ficha médica para acceder al taller.

MANDALAS

Mandala es una palabra sanscrita que significa círculo o consumación. Es decir, este término puede utilizarse para cualquier dibujo que muestre geometría simétrica compleja. En las ramas tántricas de hinduismo, budismo y el jainismo esta palabra describe la elaboración de cosmogramas compuestos de formas geométricas básicas como lo son los puntos, las líneas o cuadrados, pero también se evidencian flores de loto y complejas figuras y escenarios arquetípicos. Se usan como ayudas importantes para la meditación ya que sirven para centrar la atención y para conducir a estados específicos de conciencia.

DIBUJO DE MANDALAS

La Respiración Holotrópica es una técnica que promueve una comunicación muy íntima consigo mismo(a). Ayuda a revivir y observar desde diferentes ángulos aspectos de la propia historia personal, permite tener acceso a situaciones relacionadas con el nacimiento que generalmente están fuera del nivel de la conciencia y abre posibilidades para conectarse con aspectos espirituales, trascendentes y simbólicos en múltiples dimensiones de la percepción. Estas vivencias pueden brindar, entre otras cosas, visiones más enriquecidas de nosotros mismos, una profunda experiencia de conexión y la generación de nuevos y más amplios significados sobre nuestra vida pasada, presente y futura.

Estos procesos son expresados a través del arte, una vez que ha terminado la sesion de Respiracion, lo cual facilita el proceso de integración inicial de la experiencia. A este dibujo se le denomina Mandala.

Jung (1954) introdujo en el siglo XX los mandalas en la cultura occidental. Él los utilizó en terapias con el objetivo de alcanzar la búsqueda de la individualidad en los seres humanos. Los mandalas representan la totalidad de la mente, tanto consciente como inconscientemente, reflejando la psique humana.